
MOZAMBIQUE
La joya de Africa
Este país bañado por el Océano Índico sorprende con sus largas playas y la riqueza de fauna que habita sus reservas naturales
Existen pocos países en los que una carretera cumpla tanto la función de cordón umbilical como Mozambique. La velocidad por la RN1 no suele ser excesiva, pero de ninguna manera obliga a una lentitud exasperante típica de las pistas africanas. No hablamos de la tierra anaranjada y acartonada que alfombra los múltiples desvíos, sino de asfalto en buen estado. Tampoco es que la velocidad importe o sirva de mucho. Mozambique requiere paciencia. Es de seducción lenta. La sensación de languidez que invade nada más llegar se transforma en admiración poco a poco, día a día, conforme se va viviendo todo lo que el país puede ofrecer.

MAPUTO, LA CAPITAL
Siempre que pudieron, los portugueses levantaron las metrópolis coloniales a imagen y semejanza de Lisboa. Situada en una bahía que amansa los ímpetus del océano y una desembocadura de río, Maputo no es una excepción, al igual que Luanda, la capital de Angola, o Río de Janeiro, en Brasil. La comparación con Río no es casual. El marco natural de Maputo es bello, aunque no deslumbrante como el de Río, pero las primeras impresiones de la capital mozambiqueña sugieren que uno podría haber aterrizado en Brasil. O incluso en Cuba, cuando se cruza con uno de esos coches de los años 50 llamados «habanas», que ahora se alquilan como taxis.
Maputo es una ciudad animada, de cultura fértil y hospitalaria, que ya ha olvidado el marasmo que provocó la guerra civil ocurrida entre 1977 y 1992, un conflicto típico de la Guerra Fría, sustentado desde el exterior que la inmensa mayoría de mozambiqueños no entendió pero sí sufrió. Ciertamente, Maputo tiene contadas atracciones turísticas pero suficientes para atrapar durante días y recorrerla fácilmente a pie o en las laranjinhas, esos triciclo-taxis con una curiosa forma de naranja.
Antes de lanzarse a la carretera conviene no perderse el Museo de Arte Moderno, la Casa de Hierro y el Teatro Avenida. La Casa de Hierro es una residencia concebida por Gustave Eiffel para alojar al gobernador portugués que ha acabado siendo un monumento a la irracionalidad colonial, una estructura férrea inapropiada para vivir en el trópico diseñada por un reputado arquitecto que nunca pisó el suelo mozambiqueño.
La mayoría de turistas conocen solo un pedazo de Mozambique. La culpa de ello es, en buena parte, la proximidad con el parque Kruger, en Sudáfrica, a apenas dos horas de Maputo y desde luego más cercano que desde la sudafricana Johannesburgo. El otro gran reclamo del país es la isla de Inhaca, en el lado opuesto de la bahía de la capital, donde uno empieza a creer en aquella frase de Mia Couto: «Mozambique es un porche con vistas al Océano Índico». Couto no es solo el mejor escritor que ha alumbrado Mozambique, sino uno de los grandes novelistas contemporáneos, un candidato permanente al premio Nobel de Literatura, creador de un realismo mágico original y africano aún poco reconocido.

ISLAS QUIRIMBAS
Con animales y playas paradisiacas tan cerca de Maputo, muchos viajeros se olvidan de los otros tesoros de Mozambique. Craso error. Nunca se acaba de conocer este inmenso país hasta que no se llega a la isla que le da nombre, Ilha de Moçambique en portugués, la fortaleza dispuesta tras el paso de Vasco da Gama en 1498 para tener un lugar de control y abastecimiento en la ruta de las especias hacia la India. Y, por supuesto, las maravillas de los archipiélagos de Bazaruto y las Quirimbas, islas pintadas sobre el azur menos profundo del océano.
Y como nuestro objetivo final es el buceo, no os podeis perder el enclave de Playa de Tofo...os dejara sin respiracion
ARCHIPIELAGO DE BAZARAUTO
Aqui os dejo los centros de buceo que podeis encontrar en Bazarauto
Bucear en Inhambane y Tofo es un verdadero placer para los amantes de la megafauna marina. Se sabe que las ricas aguas del plancton atraen a los tiburones ballena, a las mantarrayas y también a las ballenas jorobadas. Por lo tanto, la industria del buceo está bastante establecida con operadores de buceo ubicados en Inhambane y más en Tofo ya que hay una bonita playa.
Puede bucear todo el año, ya que Inhambane y Tofo experimentan un clima tropical cálido. Es más seco de abril a diciembre y durante la temporada de lluvias de finales de diciembre a marzo, las lluvias son solo un aguacero rápido. La temperatura del agua puede ser un poco fría en la estación seca con un mínimo de 72 ° F (22 ° C), pero durante la temporada de lluvias sube a 86 ° F (30 ° C).
Como estas son áreas de alimentación de plancton, la visibilidad suele ser de solo 33-49 pies (10-15 m), pero la experiencia cercana y la sorpresa de estas gigantescas criaturas que salen del azul compensa el mar nublado. Los principales sitios de buceo para visitar serían las estaciones de limpieza de manta ray que se encuentran fuera de Tofo en un área apropiadamente llamada Manta Reef. Fuera de Inhambane, es probable que bucee en Kingfisher Reef, que también tiene estaciones de limpieza.
Además de limpiar estaciones, visite arrecifes más alejados de la costa para una mayor acción de tiburones. Es posible que se necesite algo de experiencia de buceo en los arrecifes externos, ya que existen fuertes corrientes y condiciones de superficie entrecortada que pueden requerir una entrada negativa. Para los tiburones ballena, hay viajes de snorkel para verlos y el buceo no es realmente necesario, aunque sin duda no es nada de qué quejarse con uno durante una inmersión.
Aqui os dejo los dcentros de buceo que podeis encontrar en Praia de Tofo